Apenas te quitas la cobija y sientes un incómodo frío.
Son las 7 de la mañana, la hora en la que debes levantarte para ir al trabajo, pero apenas te quitas la cobija y tu cuerpo siente de inmediato un incómodo frío mucho más fuerte que el de semanas atrás. Tardas en meterte en la ducha, sales a la calle y las manos se te congelan al igual que la nariz, quizá hasta te sientas un poco triste.
El cuerpo enfrenta una serie de cambios durante los días fríos, vale la pena saber por qué ocurren cada uno de ellos: [adsense]
1. Empezamos a tiritar ¿pero por qué?’
Cuando nuestro cuerpo se enfrenta a las bajas temperaturas el cerebro inmediatamente lanza una señal a través de la columna vertebral a los músculos para que éstos se contraigan y se relajen de forma veloz.
De esta forma empieza a temblarnos tanto la mandíbula como los dientes, esta acción funciona como una especie de calefacción pues con el veloz movimiento le llega calor a nuestro organismo.
2. Sin darnos cuenta consumimos más grasas
A la hora en que redacto este texto hace frío, y me doy cuenta que momentos antes hice algo que pocas veces hago: ordenar una dona de chocolate pese a no tener tanta hambre.
Pues la ciencia tiene una explicación para esto: resulta que el cuerpo nos empieza a pedir más alimentos ricos en calorías porque el frío reduce los niveles de serotonina.
3. Con el frío pueden dolernos los huesos
Seguro has escuchado la frase “es un frío que cala los huesos”, pues el dicho no está muy alejado de la realidad.
Resulta que con las bajas temperaturas se contraen los músculos y con ello las articulaciones se vuelven más rígidas y al flexionarlas empiezan a doler.
4. Se nos resecan los labios
Es muy conocido que el frío es una de las razones por las que se resecan los labios.
La causa de esto se debe a que los labios están cubiertos por una piel muy delgada, de hecho es la más delgada de todo nuestro cuerpo, de ahí que un clima helado en el que falta la humectación contribuya al agrietamiento y descamación de esa zona.
5. El frío nos puede poner tristes
El cambio de ánimo durante la temporada invernal es conocido por la psicología como “trastorno afectivo estacional” el cual tiene como síntomas falta de energía, dificultades de concentración, tristeza, irritabilidad, aumento de peso e incluso somnolencia.
La razón es porque al parecer el frío cambia los niveles de melatonina y serotonina, sustancia que de alguna u otra forma tienen la facultad de regular nuestros estados de humor.
[…] ¿Tienes frío? Esto es lo que le pasa a tu cuerpo. […]