Cerca de mil teléfonos, de un millón robados, se usan para crímenes.
Suena el teléfono, y tras contestar, a uno le toman desprevenido los gritos de un menor. Puede ser niña o niño. “¡Ayúdame papá!” se escucha entre balbuceos entrecortados por alguien llora sin cesar, entonces; el presunto secuestrador se hace con la llamada para pedir la recompensa por el menor, como si este fuera el hijo de quien recibe la llamada.
Ese es el modus operandi con mayor popularidad en México. De acuerdo a un nuevo reporte del Consejo Ciudadano, el mismo que da cuenta de una alarmante alza en llamadas de este tipo. Aproximadamente de enero a agosto de 2012 hubo 77,000 reportes de este tipo, pero en este año son 148,000.
Los factores son proclives para que aumenten el número de casos: en México en las cárceles hay inhibidores de señales de telefonía celular, pero la mayoría de ellos no funciona, y se estima que cerca de mil smartphones de cada millón robados, se utilizan para extorsiones, de acuerdo a la Anatel.
Los intentos a la alza, pero las extorsiones a la baja
El Consejo Ciudadano es la misma organización que está detrás de la app ‘No Más XT‘, la cual puede servir como filtro para dispositivos Android, de manera que no reciban llamadas de teléfonos que han sido reportados previamente como sospechosos de extorsión.
Es precisamente esta app y las denuncias hechas lo que les ha permitido acceder a estas estadísticas, en donde, dentro de lo que cabe, no todo es malo.
Y es que aunque las llamadas por extorsión han ido dramáticamente en ascenso, concretar una extorsión podría estarse haciendo más difícil. En los primeros ocho meses del 2012 el número de casos consumados fue de 768, lo que equivale a casi el uno por ciento de efectividad.
En cuanto a 2018, los casos en los meses de enero a agosto fueron 914; lo que resulta en un porcentaje de efectividad de 0.6 por ciento.
Sin embargo estos números solo pueden servir como referencia, pues hay mucha gente que no denuncia. Hay que visibilizar el tamaño del problema, es indispensable realizar denuncias para llamar la atención de las autoridades. Resumidamente cuando hablamos de uno que indiscutiblemente está a la alza.
