Si no hay apoyo inmediato será equiparable a la registrada en 2012.
Por falta de lluvias en la Región Sureste, no habrá cosecha de maíz y frijol en las tierras de temporal en el ciclo primavera-verano, y a esto se suma la muerte de animales por sed e inanición.
Si no llegan apoyos inmediatos al campo por parte de las autoridades federal, estatal y municipales, la mortandad de ganado será equiparable a la registrada en la sequía entre 2011 y 2012, en que se perdió casi la mitad de los hatos en Coahuila.
Armando Mata Valdez, presidente del Comité Estatal “Dorados de Villa”, organización de agricultores, ixtleros y ganaderos, urgió a la Secretaría de Gobernación a emitir la “Declaratoria de Desastre Natural por la ocurrencia de sequía severa”, antes de que los campesinos pierdan más chivas, becerros y vacas.
“Ya se debe declarar el estado de emergencia y ayudar al campesino, dar pastura para los animales. Es una situación crítica, caótica y los niveles de los pozos están bajando hasta 40 metros, hay menos agua y el 80% de los aguajes en la Región Sureste están secos y las autoridades están dormidas ante la situación”.
En las comunidades rurales, los ejidatarios reportan la muerte de los animales por hambre y sed y las crías son vendidas a bajo costo, para no sufrir una pérdida total.
“El campo está colapsado, tenemos un 10% de mortandad pero se va a incrementar a un 30% si no llueve en 15 días o si no les damos alimento, el ganado se está malbaratando y no hay cultivos: están los terrenos barbechados y sembrados en seco, pero no van a germinar”.
“Que el gobierno nos apoye con subsidio para comprar pastura, concentrados, vitaminas, y que nos apoyen con papalotes, con equipos para sacar agua de algunos pozos que hay todavía en la Región Sureste”.
Mata Valdez lamentó que familias de diversos ejidos no cuenten con agua ni para beber, un motivo más para lanzar la declaratoria de emergencia.