El ataque ocurrió en la madrugada del domingo.

El festejo de cumpleaños de una joven en una noche de sábado terminó en pesadilla cuando ella y una amiga con la que se dirigía a su casa recibieron una golpiza por parte de un grupo de jóvenes.

Varios de ellos identificados como empleados de Aeroméxico, a quienes irritó los apremiaran con el claxon para que avanzaran en su vehículo por una calle del centro histórico de esta ciudad.

En su intento por detenerlos la joven acabó siendo atropellada por el conductor de la camioneta en la que viajaban los agresores, dos hombres y una mujer.

Incluso, parte del incidente fue registrado en un video que tomó uno de los testigos, grabación que fue subida a las cinco de la mañana de ese mismo día en la página de Facebook “Guanajuato sin censura”.

El video lleva más de 48 mil reproducciones, y fue a partir de esta denuncia que varios de los involucrados fueron identificados, ya que testigos los ubicaron en una fotografía que habían subido antes del incidente a redes sociales, donde aparecen en el antro La Unión Brebajería.

Dos de ellos, Roberto Escoto y Cindy Martin (como aparecen en sus perfiles de Facebook) habrían sido quienes agredieron directamente a las dos jóvenes y además golpearon y dañaron el vehículo en el que éstas viajaban, según se aprecia en el video.

La foto fue posteriormente eliminada del “muro” del bar.

Además, durante la gresca a uno de los atacantes se le cayó el celular, teléfono que fue recogido por un testigo y con ello se constató la identidad de los agresores y cómo éstos no sólo intercambiaron mensajes incitando a quienes descendieron del vehículo a golpear a las dos mujeres, sino que también se burlaron de las víctimas, según pudo conocer Apro.

Así se conoció que otra de las involucradas en la agresión y que permaneció en el vehículo incitó a sus amigos a golpear a las dos mujeres. Ella aparece en su perfil de Facebook como “Ely de Dios”, originaria de Tabasco y con estudios en la Universidad de Guanajuato y también empleada de Aeroméxico.

Las víctimas presentaron denuncia penal en una agencia investigadora de la Procuraduría de Justicia del estado en esta ciudad, misma que dio pie a la carpeta de investigación 90610/2017.

Cuando el testigo se dio cuenta de que el aparato pertenecía a los agresores, entregó el celular a las víctimas de manera anónima.

El teléfono ahora está en manos de los investigadores de la Procuraduría de Justicia, al igual que el video.

Noche de pánico

La grabación fue subida al muro de “Guanajuato sin censura” el 3 de septiembre a las 5:02 horas; dura un minuto con 27 segundos y fue acompañado por este comentario:

“Incidente entre conductores y pasajeros de 2 vehículos en Cantarranas llegando a teatro principal. Testigos del momento aseguran que fue provocado por el vehículo delantero, ya que iba a una velocidad muy baja y eso provocó a que los de la camioneta trasera les echaran el claxon, lo que ‘molestó’ a los de adelante.

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“Un recordatorio de ‘si tomas, no manejes’”.

El incidente ocurrió en la calle Cantarranas, en el centro histórico de la ciudad. El video comienza cuando dos de los ocupantes de una camioneta blanca (dentro de la cual hay más pasajeros) están en la calle, a ambos costados de una camioneta blanca Ford Courier (pick-up); un hombre está del lado de la conductora mientras que otro joven y una mujer se ven del lado de la pasajera.

Los tres agresores abren las puertas de la unidad, golpean a las jóvenes y vuelven a abrir las puertas. Luego lanzan puntapiés a los espejos retrovisores.

Una de las atacantes intenta sacar a la pasajera de la unidad, quien lanza algunas patadas para impedírselo.

“¡Bájate, bájate!”, le grita entre insultos.

Mientras su acompañante lanza patadas al vehículo, hasta que hace añicos el retrovisor.

Después, cuando varias personas que salían de los antros del centro comenzaron a acercarse, los tres atacantes abordan la camioneta y avanzan sobre la calle.

Detrás de la camioneta Courier se observa un taxi que en la parte trasera tiene la matrícula 42-38-EGF y el número económico GU 0078. Como el taxista, otras personas que se encontraban a esa hora en esta calle sólo se limitaron a observar la agresión.

Según lo consignado en la carpeta 90610, la conductora agredida narró que los ocupantes de la camioneta blanca que circulaba delante de su vehículo se molestaron cuando les tocó el claxon, ya que ya llevaban varios metros jugando, frenaban y luego avanzaban muy despacio.

A la altura del Teatro Principal, una mujer que iba en el asiento del copiloto les gritó molesta por los bocinazos. Las dos jóvenes del vehículo Courier respondieron también molestas porque no podían avanzar, y fue allí cuando la mujer y los otros dos jóvenes ocupantes se bajaron de la unidad e iniciaron la acometida.

“¡Ya valieron verga!”, les gritaron a las jóvenes.

Sin embargo, el video no captó todo lo ocurrido.

La denuncia consigna que cuando el grupo se retiró, las dos jóvenes bajaron corriendo del Courier y trataron de impedir que huyeran sus atacantes. Una de las víctimas se aferró a una portezuela trasera de la camioneta en la que iba el grupo, pero desde adentro uno de los ocupantes subió la ventanilla y le atoró el brazo, sin detener el automotor.

Unos metros adelante bajaron la ventanilla y lanzaron una patada a la joven, quien cayó al piso, justo debajo del vehículo que siguió avanzando.

Una de las llantas traseras pasó por encima de su pierna izquierda.

Los agresores lograron huir, pues en esos momentos no había un solo policía municipal en esa zona del centro histórico de la capital.

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