Ante el incremento de la violencia, Sonora permite a sus policias matar a ladrones armados con machetes.
“Deben de saber los delincuentes que estén portando armas prohibidas, que estén circulando por las vías públicas y sean inspeccionados por nuestros elementos, que al más mínimo amago o [cuando] desenfunden esas armas prohibidas nuestros elementos van a reaccionar con sus armas de cargo en legítima defensa, y lo más probable que va a suceder es que van a ser abatidos”
En los últimos meses han aparecido hombres armados con machetes que asaltan tanto en colonias de las periferias como en el centro de Hermosillo, la capital del Estado. Uno de los casos que desbordó el hartazgo social fue el ataque a un enfermero que trabajaba en un hospital en la capital. Martín, así se llamaba, fue herido con un machete el 3 de mayo por seis adolescentes que le pidieron dinero al salir de una tienda de autoservicio.
El hombre dijo a medios locales que había presentado una denuncia. Estaba indignado y temeroso por lo sucedido. “Que las autoridades hagan algo porque los policías ni siquiera los buscaron”, pidió en una entrevista de radio. Once días después, Martín fue nuevamente atacado y asesinado. Los vecinos encontraron su cuerpo cerca de su casa con una herida en la yugular.