El incidente ocurrió en un hospital en Arabia Saudita.

Tres enfermeras tenían peculiar entretenimiento: coger recién nacidos y jugar con sus caras, deformándolas y estrujándolas.

No satisfechas con molestar así a los bebés, tuvieron la brillante idea de grabarlo en vídeo y subirlo a las redes sociales ¿qué podía salir mal?

Pues salió mal que uno de estos vídeos se viralizó y acabó llegando a uno de los padres. [adsense]

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Que evidentemente no le sentó nada bien que su retoño se convirtiera en un juguete de unas enfermeras en sus ratos de descanso.

En el vídeo se ve como cogen al pequeño por el cuello antes de hacerle todas las monerías de turno.

El padre se sintió horrorizado, como es comprensible, por lo que decidió denunciarlo al hospital.

El asunto fue investigado por Sanidad, que pudo identificar a las enfermeras que participaban en este peculiar divertimento.

Aunque su nombre no ha trascendido, han sido despedidas de inmediato y su licencia ha sido revocada, por lo que no podrán volver a ejercer su profesión.

Según explica el Daily Mail, el bebé que causó el escándalo llevaba diez días en el hospital debido a una infección en el tracto urinario.